miércoles, 2 de enero de 2013

Nordkapp en moto. El regreso. Parte III

Etapa 9

Después de todo un día descansando con su correspondiente noche, salimos temprano, no hay rastros de actividad, duerme todo el camping, recogemos la cabaña, limpiamos y pasamos la fregona, como es costumbre. Cerramos y colgamos la llave en la puerta de la caseta de entrada.

Decidimos hacer un pequeño tramo de 100km y luego desayunar, pero estamos en una zona de desierto, casi sin poblaciones, nada salientable hasta llegar a Trondheim. A partir de aquí nos divertimos mucho, las carreteras son de montaña pasando por valles, en el lateral de ríos con enormes desfiladeros por ambos lados. Adelantamos a un motero Noruego que acusa una gran falta de experiencia y va dubitativo encima de la moto casi parece que temblando.

Oficina de información turistica
Iglesia Vikinga en Lom
Para la hora de comer nos estamos acercando al desvío hacia una de las visitas obligatorias del viaje, a la localidad de Otta. En mente solo llevo el nombre de Geiranger, se que esta el famoso glaciar y poco mas. Buscamos la oficina de turismo, para recabar mas información. Nos atiende una chica joven, la mejor que haya encontrado en Noruega y casi en cualquier país a la pregunta de indicaciones para el glaciar, me dice que ella no tiene planos, le digo que tengo yo mapas, pero cuando regreso de la moto, ya ha localizado uno. Nos indica amablemente todos los puntos importantes, el camino a seguir para llegar y la próxima oficina para preguntar,lo dicho la mejor.

Llegamos al pueblo de Lom, paramos a repostar, buscamos un sitio para comer, pero es un sitio turístico y tienen precios prohibitivos. Vemos un folleto con una iglesia Vikinga, es de las más importantes del país. Tan pronto arrancamos, ahí esta en la salida del pueblo, así que sin falta nos detenemos a verla, simplemente espectacular.

Ya son horas de comer, así que nos ponemos en camino con la intención de buscar un sitio donde preparar unos bocadillos, curioso que cuando no lo necesitas hay áreas de descaso por todas partes, pero ahora no hay forma de dar con una. Por fin vemos una, señalizada como tal en la carretera, pero esta dentro de un camping, les digo ante la duda ya nos mandaran irnos. El sitio es espectacular, al lado de un río con una cascada y unos rápidos espectaculares.
Espectacular cascada, al fondo el enorme Camping, a la izquierda al pasar el río nuestra mesa de merendero


























Tras la comida continuamos, ya es tarde sobre la 16h, todavía nos faltan kilómetros y estamos de nuevo sin hotel y con el miedo en el cuerpo por lo vivido el ultimo día de tener que rodar toda la noche. Desde que tomamos el desvío en esta dirección siempre ascendemos, mientras desciende la temperatura, pronto llegamos a un cruce de caminos, bordeando un lago medio helado. Justo al mismo tiempo llega un motero sueco al que paro en medio de la carretera, para preguntarle que hay por aquella dirección  ya que mi Gps indica seguir adelante. Me dice "amazing road for a motorcycle", es todo lo que necesitaba escuchar, me explica algo más, por esta continuamos, es un acierto. Simplemente espectacular, curvas subiendo  y curvas bajando de nuevo, de todo tipo, muchas de 360º, que disfrute...
Lago Helado

Aquí en medio vemos un lado helado dimensiones colosales, hasta donde alcanza la vista. Primeras fotos de rigor, continuamos, otra vez fotos... Luego al subir a Facebook, triunfa la foto aquí en Ourense están a mas de 40ºC, día de máximas históricas.

Fiordo de Geiranger
Un pequeño hotel al pie del lago, preguntamos, tienen habitaciones pero no hay wifi, como aun tenemos algo de tiempo y la carretera se acaba kilómetros mas arriba, decidimos probar suerte, y vaya suerte, la carretera sigue siendo espectacular y nos damos en las narices con el fiordo mas espectacular y famosos de Noruega.


Justo en el sitio indicado hay un mirador con estas vistas, por supuesto lleno de turistas, que bajan de los grandes transatlánticos fondeados en el fiordo, para hacer excursiones por el pueblo de Geiranger en enormes autobuses que las angostas carreteras apenas pueden soportar.

Continuamos hacia el pueblo, la carretera sigue siendo esplendida, pero la gran cantidad de autobuses hace que sea un suplicio avanzar, las curvas en S muy cerradas se les atragan a estos monstruos en estas carreteras de juguete, cuando se encuentran dos a la vez en direcciones opuestas, es una retención segura durante un buen rato, con maniobras por parte de ambos conductores. Aquí vemos carteles de alojamiento por todas partes, se que ya no tendremos problemas de alojamiento, por ello continuo pasando el pueblo para recorrer la carretera hacia el otro lado a la que solo quedan unos kilómetros.

Un vez de nuevo en el pueblo, comenzamos la tarea de la búsqueda de alojamiento, no demasiado fácil  tras varios intentos fallidos, por fin hay un camping con una "cabin" disponible por unos 80€ para los cuatro. Es enorme, nos instalamos, al lado baja una gran cascada con un gran estruendo.

Ya cambiados, visita al pueblo, cervecita, pequeñas compras y cuando anochece recogerse que maña es otro día.

Un día de aproximadamente unos 500 km y bastantes horas de moto, ya nos queda poco en los países escandinavos 

Vistas desde una gasolinera
Río al lado de Camping

Lago Helado

Borde de la carretera

Carretera hacia Geiranger

Cerca de Geiranger

Nuestra Cabaña de lujo

Cascada al lado de la cabaña

Cascada en Geiranger

Geiranger

Geiranger

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